lunes, 3 de noviembre de 2014

iPhone 6, análisis


He pasado gran parte de mi tiempo de trabajo en los últimos años analizando teléfonos Android, la prueba la tenéis en estas páginas donde escribo, pero realmente soy un usuario convencido de iPhone. He ido comprobando cómo el sistema operativo de Google iba avanzando a pasos agigantados, viendo que sus dispositivos se hacían o, y como el teléfono de Apple seguía evolucionando a su forma, un poco ajeno a lo que ocurre en la competencia.
Afortunadamente, me he encontrado con la oportunidad de tener una semana un iPhone 6, algo que me encanta, primero por conocer la renovación de un producto que vive y duerme conmigo, también por acercarlo todo lo posible a aquel que esté interesado, y en definitiva, por ayudarme a decidir si sigo confiando mi dinero en el mismo sitio, o ha llegado la hora de mirar más allá.
Todas las compañías tienen muy complicado renovar sus terminales cada año, casi les exigimos que inventen la rueda en un periodo de tiempo tan corto. En esta octava generación, Apple presenta dos teléfonos
Realmente la filosofía de producto es la misma, un dispositivo con un precio muy alto, sin demasiadas concesiones en cualquier apartado. Estoy seguro de que Apple ha querido hacer el iPhone 6 tal y como es, sin recortar en nada, y sin pensar en que hay que igualar especificaciones con la competencia.
Ya sabéis a qué me refiero, aquí prima la calidad de componentes y la optimización, no los megas de RAM disponibles. También pienso que por guardarse algo y diferenciar, hay detalles que están en el modelo Plus que serán implementados en el próximo “6S”, tiempo al tiempo.
Con la octava generación de teléfonos iPhone, Apple , por primera vez, ha claudicado al crecimiento de pantalla. Parece que no quedaba otro remedio para seguir creciendo, o para cumplir con lo que realmente quiere el público.
Sinceramente, me encanta el tamaño de mis últimos iPhones, y encontrarme con que los nuevos modelos son significativamente más grandes, me ha desanimado un poco en el proceso de renovación, pero tenía que esperar a tener uno en la mano para llegar a conclusiones mayores.
Aunque haya empezado introduciéndome a mi como usuario entre los ingredientes del análisis, no os preocupéis, esto es un trabajo lo más objetivo posible, con la intención de ser exigente en cada apartado. Aprovecharé para enfrentar las positivas experiencias que he vivido en otros teléfonos en los últimos meses, con el nuevo iPhone.
Apple acepta que sus teléfonos tienen que hacerse más grandes, pero no pierde su filosofía de producto, con mucha calidad en materiales, y componentes. El precio acompaña, y también hay dudas sobre su resistencia

iPhone 6, especificaciones técnicas

iPhone 6, características técnicas
Dimensiones físicas138,1 x 67 x 6,9 milímetros, 129 gramos
PantallaIPS LCD 4,7 pulgadas
Resolución1.334x750 píxeles (326 ppp)
ProcesadorApple A8 (doble núcleo, 64 bits), GPU PowerVR GX6450, Coprocesador M8
RAM1 GB
Memoria16 / 64 / 128 GB (no ampliable)
Versión softwareiOS 8
ConectividadLTE Cat 4, NFC, Bluetooth 4.0, Wi‑Fi ac
CámarasiSight de 8 megapíxeles con Focus Pixels, FaceTime de 1,2 megapíxeles
Batería1810 mAh (no extraíble)
Precio16GB 699 euros / 64GB 799 euros / 128GB 899 euros

No hay vuelta atrás con esto, puede que nos encontremos con productos como el 5C, pero su teléfono estrella siempre va a ser un producto Premium. Un cambio de diseño significativo, pero la misma esencia que lo permite seguir siendo un icono.
También es cierto que sus materiales y calidades eran algo casi intocable para la competencia, y hoy en día cualquiera está metiendo metal en sus teléfonos de gama alta, y apretando en las calidades generales. A pesar de eso, iPhone sigue siendo el teléfono Premium por excelencia.
Aquí el cambio importante está en el tamaño, sobre todo para los usuarios actuales de iPhone, acostumbrados a algo bastante pequeño para lo que se estila en mercado. La pantalla crece, pero el teléfono no lo hace en proporción, gracias al recorte en la bandas inferior y superior:
Además de la calidad de materiales y un nuevo diseño, pero reconocible, la cota más llamativa es la del grosor: 6,7 milímetros en un teléfono metálico y con tanta tecnología, es de valorar. Este apartado deriva directamente al de la calidad de construcción y resistencia conseguida por Apple, con un episodio "Bendgate” que está rellenando muchas páginas, y que seguirá haciéndolo. Os hablaremos de él más adelante.
Volviendo a la delgadez, si a eso le sumamos una lineas más redondas, tenemos un teléfono muy agradable de coger y usar. También ayuda el peso tan reducido que han conseguido, de 129 gramos. De alguna forma podríamos decir que hay herencia del iPad Mini en los nuevos iPhones. En lo negativo, es bastante escurridizo, así que mejor le ponemos una buena funda (la original de apple es una estupenda solución).
Destaca la curvatura de la pantalla y laterales, además de la excelente integración entre plástico y metal. No nos gustan tanto las antenas en la trasera.
Para terminar de ayudar con esa sensación de teléfono sin zonas rectangulares, incluso la pantalla es ligeramente curvada, notándose especialmente en los márgenes, que parece que entran hacia el cuerpo del iPhone. Sobre los marcos de pantalla, se reducen con respecto a iPhones anteriores, pero son más grandes que en muchos teléfonos Android de última generación.
Sin tener un montón de factores en cuenta, parándonos exclusivamente en los marcos, es echar un vistazo a unSharp Aquos Crystal y al nuevo iPhone, y es como ver un teléfono de diferentes generaciones. Hay mucho margen de mejora aquí para Apple, también para otras compañías.
Si nos olvidamos de precios y vamos directamente a comparar el iPhone 6 con dos teléfonos de la competencia que tienen tamaño de pantalla similar, o igual, y además cuentan con lo último en tecnología, nos encontramos con que el producto de Apple es más grande, y Touch ID puede tener gran parte de culpa. El botón es igual que en iPhone 5S, aunque el click es más notorio.
Es llamativo encontrarnos con que Apple deja una arista tan visible en el diseño de un producto, nos referimos a la cámara. No creemos que sea un elemento poco atractivo, o que esté mal resuelto, pero sin duda rompe la suave línea de la trasera del teléfono. La cámara queda significativamente expuesta sobre el resto del teléfono, y es lo primero que va a impactar contra las superficies (tranquilos, hay zafiro protegiendo).
Apple podría perfectamente haber confeccionado un teléfono más grueso para tapar esa protuberancia, seguiría siendo delgado, y de paso hubieran podido incluir una batería de mayor tamaño, que no es precisamente su punto más fuerte.
Hacer crecer la pantalla conlleva que los botones se organicen en consecuencia, por esto, el botón de encendido - antes arriba - pasa a estar en el lado derecho, sin duda, más accesible. Los botones de volumen son ahora más largos y rectangulares - como en iPad o 5C -, para acomodarse en el nuevo cuerpo delgado, redondeado, y más grande.
Sobre colorido, pues tenemos las misma opciones que ya teníamos presentes con el iPhone 5S: plata, oro, gris espacial. Muy bonitos, pero no os olvidéis de carcasas, fundas, o cualquier elemento protector. Más allá del "bendgate", los teléfonos se rallan con facilidad.
Es un tema demasiado personal, pero me gusta más el aspecto trasero del anterior iPhone, que el de los nuevos, con unas líneas traseras que contrastan con la carcasa de aluminio, en la que van alojadas las antenas. Especialmente en las zonas curvadas, en la zona inferior y superior. Un teléfono muy parecido en aspecto como el HTC One M8, resuelve mejor este asunto.
Cuando presentaron el teléfono, me hice a la idea de un producto más grande, en el caso del iPhone de 4,7 pulgadas creo que es el tamaño ideal para la mayoría de gente, y después de haberlo usado largo y tendido, he quedado satisfecho con sus dimensiones (en muchas operaciones puedo seguir usándolo con una mano). Aunque creo que hay margen de mejora.
Por ejemplo, con la resistencia, ya que Apple no ha confeccionado sus nuevos teléfonos pensando en que los vayamos a meter debajo del agua. Este punto lo coloca en la zona de teléfonos de gama alta que no han querido apostar por ello, y deja vía libre a Sony y Samsung para seguir reinando en la otra.
En los últimos días habéis visto que el fenómeno "Bendgate" no para de aparecer en medios. Las alarmas han estado sonando, y Apple ha querido pararlas con un comunicado en el que nos cuenta que no ha habido más que nueve casos de gente con problemas - se han vendido millones -. Se han estado realizando pruebas, y la realidad es que es más débil que muchos, pero también lo es un HTC One (con el que comparte el aluminio). A nosotros no nos ha pasado nada con el iPhone 6, y no me gustaría darle más importancia al asunto.
Apple se ha visto en la necesidad de evolucionar a un tamaño mayor, pero conservando lo que ya tenía construido. En el caso del iPhone 6, esas 4,7 pulgadas de pantalla debían de contener un número de píxeles que le permitiera conseguir una densidad de píxeles idéntica a la utilizada desde el iPhone 4 (2010).
O lo que es lo mismo, una Retina Display con sus 326ppi. Misión cumplida gracias a la peculiar resolución de 1.334x750 píxeles. En ella los contenidos lucen exactamente de de la misma forma que hasta ahora, mismas proporciones y definición, pero con un espacio de trabajo mayor.
La competencia Android en la gama alta juega con otros valores, el que menos se atreve con Full HD en un tamaño de pantalla similar, lo que los hace irse hasta los 400ppi. Alguien podría entender que hay una ligera mejora en ello, lo que no entiendo es porque algunos se marchan hasta resoluciones QHD, que ahora mismo no hacen más que gastar más y rendir peor.
El panel IPS del nuevo iPhone no va a defraudar a nadie, Apple tiene muy claro que aquí tienen que ser los mejores y optar por el componente más capaz en los principales parámetros de visualización. Siempre lo han hecho así y la realidad es la competencia mejora, pero difícilmente tiene mejores soluciones.
La pantalla cuenta con protección Gorilla Glass 3, y eso que la información de la pantalla parece estar flotando sobre el teléfono, hay muy pocos elementos intermedios entre nuestro dedo y los píxeles, o al menos esa es la sensación que tengo.
Lo que más me gusta de los iPhones es que sabes que se van a ver bien en exteriores, Apple cuida este detalle al máximo, y con el nuevo modelo no iba a ser menos. Los niveles de brillo son cercanos a los 600 nits, no muy superior a los del iPhone 5S, pero a valorar al tener una pantalla más grande.
A lado de mi iPhone 5, no puedo decir otra cosa que se ve notoriamente mejor, especialmente enniveles brillo y contraste (1.400:1), casi doblando a mi teléfono actual, pero sin llegar al nivel AMOLED en negros (eso sí, nada de púrpuras). Además, hay otros dos apartados que sobresalen, que son la reproducción de color y los ángulos de visión, gracias a la tecnología de píxeles implementada.
Podemos hablar maravillas con nuestra experiencia personal, pero también está bien darle crédito a laboratorios especializados como DisplayMate, que van probando teléfono a teléfono que va apareciendo al mercado. Para ellos, es la mejor pantalla LCD del mercadosolo superada por la AMOLED del Galaxy Note 4. Creo que la mayoría estaremos de acuerdo en la calidad de la pantalla de ambos dispositivos.
En cuanto a su funcionamiento, es otro distintivo del iPhone, la pantalla nos responde como si estuviera viva. Si nos paramos a ver configuraciones, hay una opción llamada Display Zoom que permite agrandar la interfaz, o bien podemos añadir una nueva fila de iconos.
Cuando Apple presentó el teléfono, nos contó que contaba con una tecnología que mejoraba losángulos de visión, conocida como Dual-domain pixels. Consiste en que los píxeles no están alineados de forma plana, sino que tienen una forma de "v", y eso hace que sean más visibles desde diferente ángulos. También consigue que el color cambie menos, como es habitual al mirar una pantalla desde diferentes ángulos.
No es algo que hayan inventado ellos, se ha visto en monitores IBM, incluso en teléfonos como el HTC One M7 o el One X, se utiliza una configuración de píxeles similar. Si lo que os preguntáis qué tal funciona la cosa en el iPhone 6, pues es uno de los mejores teléfonos del mercado en cuanto a ángulos de visión.

Rendimiento y batería

Es el apartado donde menos me he sentido sorprendido, funciona como mi iPhone, algo más suelto en transiciones y carga de aplicaciones, pero poco más. Pero está claro que dentro hay mucha novedad con la llegada del Apple A8, que le permitirá vivir actualizado mucho más tiempo que los modelos actuales. También aparecerán benchs y juegos que sepan sacar a relucir su potencia dormida.
Sobre el Apple A8 tenemos un artículo especial con información que no tengo la intención de colocar aquí y hacer más extenso el análisis, podéis conocer más sobre componentes, diseño y rendimiento en él. Apple nos cuenta que en líneas generales A8 es 25% más rápido que A7.
Pero sí vamos a presentar los puntos principales, como que se trata de un procesador de doble núcleo con arquitectura de 64 bits, desarrollados con tecnología de fabricación de 20nm. La velocidad en la que se mueven esos núcleos - una evolución de Cyclone - se estima que está en 1,4GHz.
La potencia gráfica del equipo es bastante superior - 50% -, pero parte se diluye en lidiar con la mayor resolución de pantalla. La gráfica es una PowerVR GX6450, con cuatro núcleos en su interior. Se trata de la GPU superior a la empleada en iPad Air y iPhone 5s.
Ya sabemos que Apple construye sus equipos en base a la optimización y necesidades que tienen, ajustando al máximo. Pero nos sorprende volver a encontrarnos con un giga de RAM. No es que yo sea un amante de los números llamativos que se ven en la competencia, pero se me antoja poca cantidad para gestionar muchos procesos, o para lo que tenga que venir en el futuro. En aplicaciones tan utilizadas como Safari, es ya un problema evidente.
Tampoco estoy enamorado de los benchmarks, pero he comprobado como en 3DMark se porta mejor que un Galaxy S5, o un Oppo Find 7, también hace lo propio en Geekbench 3, o en la carga - no ejecución - de juegos exigentes, es notoriamente más rápido.
Que las aplicaciones corran mejor también está relacionado con que estén desarrolladas para esos 64 bits. También ayudará Metal, el nuevo lenguaje de programación que sacará rendimiento de la GPU.
En cuanto a memoria de almacenamiento, tenemos tres opciones: 16, 64 y 128GB. Por el precio que nos piden, bien podrían haber iniciado la oferta con 32GB, además, el modelo de 16GB se queda insuficiente rápidamente si eres un usuario medio.
Sobre conectividad, el iPhone anda bien armado. La conectividad LTE disponible es Cat 4, gracias a un modem Qualcomm MDM9625M. Tenemos Wi-Fi 802.11ac, y por primera vez, NFC. El problema es que ahora mismo es hardware cerrado para los desarrolladores, y solo se usa para Apple Pay.
El nuevo coprocesador M8 introduce la altura entre los parámetros a registrar
Terminamos con los procesadores adicionales que se han añadido, como la evolución del M7 al M8. Se trata de un coprocesador encargado de lidiar con todo lo que tiene que ver con movimiento, con datos llegados de sensores y un barómetro (novedad en iPhone, permite estimar la altura).
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No nos olvidamos del sonido, pieza con pinta de ser clave en una compañía que se ha gastado una millonada en Beats, y que no parece ser que tenga nada revolucionario que aportar en el nuevo iPhone. Ni los auriculares son espectaculares - son buenos -, ni el altavoz va a marcar ninguna época - mucho mejor HTC -, pero todo funciona muy bien.
La calidad de sonido en las llamadas también es muy buena, no hay pegas, aunque también es cierto que iPhone nunca ha sido el mejor teléfono en este aspecto. Leyendo sobre la calidad de sonido enun interesante artículo de Mashable, el nuevo iPhone no está trabajando con audio en alta resolución (24-bit/192kHz), aunque podría hacerlo, como ocurre con algunos modelos de LG, Samsung o Sony. En cualquier caso iPhone 6 sirve de fuente de sonido a 24-bit/96kHz, que ya es superior a un CD.
Me resulta muy complicado evaluar la autonomía de un teléfono en una prueba de este tipo, no paro de jugar con la cámara, y nuevas funcionalidades, saliéndome claramente de un uso normal del teléfono. Obviamente, así me quedo sin batería en poco tiempo.
Algo más de batería para conseguir una autonomía algo mejor que en iPhone 5s, nada revolucionario
La teoría dice que contar con una batería de mayor tamaño - 1.810 mAh - debería reportar mejores números, pero también es cierto que la pantalla es considerablemente más grande, cosa que equilibraría un poco la cosa. Los números de Apple hablan de una ganancia evidente en WiFi - una hora -, y algo menor bajo redes de operadoras.
Lo que es una realidad es que la optimización de iOS y el hardware de Apple es muy buena (Apple A8, 20nm), tenemos una autonomía similar a los principales teléfonos de la competencia, que se mueven por encima de los 2.500mAh. El único que juega en la misma liga es el Galaxy Alpha, con 1.860mAh.
Si os preguntáis por pruebas de laboratorio, no les encuentro demasiado sentido, realizan unos procesos que poco tienen que ver con el uso habitual de un teléfono, ni todo el mundo tiene las mismas preferencias. Si queréis un ejemplo serio lo tenéis en Anandtech, donde el iPhone se comporta a muy buen nivel con respecto a la competencia, ligeramente mejor que un 5s. En mi experiencia, estoy de acuerdo con esa conclusión.
Hasta que no realicemos un análisis después de un mes de uso, puedo adelantar que el consumo de batería y duración de la misma tiene mucho que ver con los de un iPhone 5s. No hay un gran cambio:a cargarlo al llegar el final del día si le hemos dado un uso intensivo, o al medio día del día siguiente si no le hemos exigido demasiado.
Una cosa tengo clara, aunque consigan mejorar los números con actualizaciones - iOS 8 no ha nacido muy fino -, el que busque una ganancia importante en autonomía, eso lo puede encontrar en el iPhone 6 Plus, con su batería de 2915mAh.
Un apunte sobre cargadores, el teléfono viene con uno de 5W - el habitual -, pero es posible cargarlo con uno de más potencia como el del iPad - 10 W -, consiguiendo acelerar el proceso de forma significativa (especialmente en 6 Plus).
Los nuevo iPhones se presentan con nuevo iOS, como viene siendo lo habitual, y aunque en esta ocasión ha aparecido algo más verde de lo que cabía esperar -bugs -, ya se empiezan a ver detalles que aprovechan las pantallas de mayor tamaño.
También abre mayores posibilidades a aplicaciones de terceros, nos encontramos con la introducción de Continuity, y el estreno de Apple Pay, el sistema de pago de la casa. El primer punto es un paso tan grande para la compañía como el propio crecimiento de las pantallas, ya que se abren las puertas a nuevos teclados, nuevas formas de compartir, y en definitiva, poder elegir alternativas a las que vienen de serie.
iOS sigue siendo iOS, el cambio más importante llega con la apertura a los desarrolladores
Realmente no hay un cambio en la interfaz, estamos ante los mismos elementos principales de interacción, y prácticamente las mismas posibilidades. Cualquier usuario de iOS se sentirá como pez en el agua, y el que llegue nuevo, aprenderá fácilmente la plataforma.
En cuanto a la imagen y diseño, tampoco hay cambios, se realizaron en iOS 7, dejándolo todo lo más plano y ligero posible. Sobre el aprovechamiento de las nuevas dimensiones de pantalla, hay algunas posibilidades a destacar:
  • Reachability o "Alcance", más interesante en el modelo plus, lo que hace es desplazar la parte superior de la pantalla hacia abajo para poder usar el teléfono con una mano. Se saca con un ligero doble toque en el botón físico.
  • Display Zoom, ya lo explicamos en el apartado de pantalla, es una forma de hacer más grande a los elementos de la interfaz, o bien quedarnos con una fila nueva de iconos.
  • Un par de detalles que intentan aprovechar el nuevo tamaño de pantalla, pero creo que todavía hay mucho espacio por aprovechar en los nuevos iPhones
    Aunque todas funcionan, muchas aplicaciones se están adaptando ahora a iOS 8, y a los nuevos iPhones, paciencia. En cuanto a novedades interesantes para usar en el día a día, no nos vamos a extender demasiado y realizar aquí un análisis de la nueva versión, pero sí podemos tener en cuenta los siguientes puntos:
    El centro de notificaciones se hace más completo
    Ya nos hemos acostumbrado a él con iOS 7, se estrenó con una aproximación muy "Android" a la idea de tener agrupadas las notificaciones en una barra desplegable. Con iOS 8 se ha visto rediseñado con una visión más clara de los elementos, y la posibilidad de incluir "widgets". Nunca he tenido interés por widgets en ninguna plataforma, menos si me los meten en una barra de notificaciones, pero ahí están y habrá que ver cómo evolucionan.
    Las búsquedas universales
    O lo que es lo mismo, Spotlight Search, que es accesible con un solo gesto de arriba hacia abajo, y amplía la oferta de resultados. Busca en el teléfono, entre contactos y aplicaciones, pero también en servicios de la casa como iTunes, o externos como Wikipedia, o sitios de noticias. Tiene en cuenta el contexto en el que nos encontremos.
  • Respondiendo notificaciones
    Otras de las funcionalidades útiles de iOS 8 es la interacción rápida con notificaciones. Por ejemplo, nos llega un mensaje, y nos salta un globo con la notificación, pues sin salir de lo que estamos haciendo podemos darle una respuesta.
    Siri es más listo
    En primer lugar, ahora Siri permite que despertemos al teléfono con un "Hey Siri", no es algo que sea nuevo en esto del reconocimiento de voz integrado en sistemas operativos, pero sí en iOS.
    La particularidad aquí es que solo funciona con el teléfono conectado a la red de energía, suponemos que la funcionalidad consume bastante. La otra cosa relevante es la integración de Shazam en Siri, ayudándonos a reconocer canciones.

    Cámara

  • No quiero hacer del análisis un artículo infinito, sobre las especificaciones y posibilidades de la cámaraiSight ya preparé un artículo que considero completo, os invito a echarle un vistazo si queréis ampliar. Aquí vamos a repasar un poco sus puntos principales, e ir directamente a la experiencia y pruebas realizadas.
    Apple decidió quedarse en los mismos 8 megapíxeles que ya tenía su anterior modelo, despreocupada por la posibilidad de hacer crecer ese número, estaba más interesada en ganar en calidad, rapidez y eficiencia. La idea es bastante complicada: conseguir la mejor calidad en foto y vídeo, sin que el usuario tenga que ser un entendido en el tema.
    Para mi la cámara es el apartado mejor conseguido del teléfono, junto a la pantalla. La verdad es que estoy algo condicionado ya que me gusta como Apple y Sony confeccionan sus cámaras, pero es así, todo funciona perfectamente, y los resultados son fantásticos. Comparado con modelos anteriores, mejoramos en situaciones de poca luz, en vídeo, y en enfoque.
  • Precisamente en el enfoque es donde está la gracia del nuevo sensor, ya que han incorporado un sistema de detección por fase que permite ser mucho más rápida que generaciones anteriores, y que otros teléfonos de la competencia. Distribuidos entre los píxeles, sustituyendo a algunos de color verde, tenemos los Focus Pixels, que revolucionan la velocidad a la que ocurre el proceso.
    También debemos valorar el tamaño del nuevo iPhone 6, con una extrema delgadez, en la que han conseguido incorporar la que para mi es la mejor solución en un móvil. Más allá de la propia cámara, también cuenta el software y el hardware desarrollado para la ocasión. Hablando de diseño, no todo es perfecto y la protuberancia de la cámara saliendo sobre la trasera, no es precisamente lo mejor resuelto del teléfono (al menos está protegida con zafiro).
    El iPhone 6 destaca sobre la competencia y hermanos mayores cuando se marcha la luz, con un ruido inferior, buen detalle y un funcionamiento veloz. En este aspecto creo que solo hay un teléfono por encima, el Nokia Lumia 1020. Por cierto, la lente del teléfono de Apple está compuesta por cinco elementos y cuenta con una apertura máxima f/2,2. Cuando haga falta, seguimos teniendo el eficaz flash de dos tonos.
  • Los panoramas son un modo de funcionamiento que estando bien resuelto, me encanta, pero que en la mayoría de teléfonos que tengo ocasión de probar, son un trámite. Poca calidad y excesivo barrido, que en el caso del iPhone no suele ocurrir. En el nuevo teléfono, si cabe se han mejorado con ajuste automático de exposición y un tamaño resultante de 43 megapíxeles.


iPhone 6 Plus, análisis



Si lo que los consumidores le exigimos a un smartphone no es similar a lo que le pedíamos hace unos años, ¿por qué el tamaño de pantalla sí tendría que serlo? En Android, ya fuera por guerra de especificaciones o haber leído bien el mercado, el tamaño de pantalla de los franquicias no ha hecho más que crecer.
No creo que esta pregunta de los usos del smartphone, tal cual, se la hicieran en Apple antes de lanzar los modelos de 2014, pero sabían que, si querían mantener un ritmo de ventas acorde con los últimos años, tenía que haber un iPhone con más pantalla. Y en eso que llegó no solo el iPhone 6 sino el nuevo iPhone 6 Plus, cuyo análisis ya tenemos para ti.
¿Cómo ha sido la entrada de Apple en el mercado de los phablets? Lee y lo descubrirás.
Este 2014 Apple dejaba de lado los iPhone de 4 pulgadas y anunciaba dos nuevos modelos. En realidad, Apple no ha sacado dos iPhone de más tamaño, se ha pasado a una gama nueva, pues aunque se mantiene a la venta el iPhone 5s, no es un terminal cuya pantalla se vaya a mantener en principio en renovación anual.
Apple no ha sacado un iPhone de más tamaño, se ha pasado al segmento del “más tamaño”
El punto de partida de Apple para el mundo del smartphone es el modelo iPhone 6 de 4.7 pulgadas, mientras que su propuesta para los phablets es el iPhone 6 Plus que hemos probado en Xataka.

iPhone 6 Plus, principales especificaciones

Comenzamos nuestro análisis del iPhone 6 Plus repasando las principales características de este phablet con el que Apple se estrena en un segmento nuevo para ellos:
iPhone 6 Plus, características técnicas
Dimensiones físicas158,1 x 77,8 x 7,1 milímetros, 172 gramos
PantallaIPS LCD 5,5 pulgadas
Resolución1920x1080 píxeles (401 ppp)
ProcesadorApple A8 (doble núcleo, 64 bits), GPU PowerVR GX6450, Coprocesador M8
RAM1 GB
Memoria16 / 64 / 128 GB (no ampliable)
Versión softwareiOS 8
ConectividadLTE Cat 4, NFC, Bluetooth 4.0, Wi‑Fi ac
CámarasiSight de 8 megapíxeles con Focus Pixels, FaceTime de 1,2 megapíxeles
Batería2915 mAh (no extraíble)
Precio16GB 799 euros / 64GB 899 euros / 128GB 999 euros            

Gigante iPhone

Ante el paso importante en aumento de pantalla que Apple iba a dar con el iPhone 6, las líneas de diseño del anterior modelo tenían que cambiar por completo. Resulta complicado, si no imposible, plantear en el mercado un terminal de gran pantalla en el que no se presta atención a lacombinación de grosor, peso y diseño de los bordes. Y añadiría anchura, aunque esa especificación es tan obvio que debe cuidarse que prefiero dejarla como algo separado.
Todos esos condicionantes, los tres primeros principalmente, Apple los ha ejecutado con muy buen resultado en el iPhone 6 Plus. El terminal podemos considerarlo ligero para su tamaño, es finoy el diseño general adopta redondeces en los bordes para que su caída en la mano sea la que debe. De hecho, Apple vuelve a dejarnos un smartphone muy equilibrado.
Cógelo como quieras pero el iPhone 6 Plus es ingobernable con una sola mano
Si hay realmente peligro de que el iPhone 6 Plus se nos caiga de las manos, no será por el uso del metal en la carcasa o los bordes redondeados. El iPhone 6 no es especialmente deslizante en mano, me lo parecía más el iPhone 5s por ejemplo.
El único motivo de esa sensación al cogerlo es que es ingobernable con una sola mano, y no muchos consumidores podrán manejarse con él sin que el peligro que de acabe por los suelos esté más que presente. Los malabarismos para tratar de llegar a sitios inalcanzables con un solo dedo se pagan.
Que con el iPhone 6 Plus podía un terminal muy grande en el mercado lo tiene claro hasta la propia Apple. La compañía que se jactaba y hasta miraba por encima del hombro a aquellas que iban año a año aumentando la diagonal de sus pantallas, ha tenido que dejar de lado lo de que en sus terminales se llega a cualquier sitio de la pantalla sin complicaciones.
La inclusión de un modo para bajar las tres filas superiores no es más que la demostración de que Apple sabe que ha hecho un terminal que no se maneja de forma cómoda con una sola mano. Tras dos semanas completas usando de forma intensiva el iPhone 6 Plus, ese modo Alcance no me ha proporcionado ninguna ventaja pese a que lo de los dos ligeros toques en el botón de inicio funcionan bastante bien, pero al final, desplazar la mano de arriba a abajo es casi imprescindible para un manejo fluido del iPhone 6 Plus.
Mi consejo es que, si piensas en el iPhone 6 Plus como un futurible terminal, asumas que su manejo lógico es con dos manos. SI lo haces, estarás preparado para realmente aprovechar y apreciar el potencial de un terminal con semejante diagonal de pantalla.
Y no solo eso, también hay que reconocer que los dos principales rivales por dimensiones de pantalla (LG G3 y Note 4), lo hacen mejor que Apple si nos referimos exclusivamente a tamaño general del dispositivo. Llevar simplemente el diseño de un terminal más pequeño, tal cual, a un escalón superior requiere pensar en algo más.
Los dos peros que hay que colocar al diseño del iPhone 6 Plus, además del tamaño general, tienen como protagonistas a las bandas de color diferente al de la carcasa, que es cuestión de gustos pero afean la continuidad del diseño de la carcasa de metal, y a la cámara que sobresale.
Esa protuberancia es mínima pero apreciable. La protección con zafiro debe ayudar a que no haya problemas con su resistencia pese a quedar más expuesta que si fuera integrada.
No le vamos a pedir a Apple que reste calidad a la cámara por reducir las dimensiones de esta parte importante de su terminal, pero sí que nos quedamos con la sensación de que integrarla completamente en el diseño hubiera dado la oportunidad a Apple de mejorar un apartado que nunca sobra: capacidad de la batería. O quién sabe si un extra de resistencia, terreno al que ya se han abonado buena parte de sus principales rivales. Y la tendencia parece que se mantendrá.
Ese aumento de grosor para igualar carcasa y cámara no creo que hubiera penalizado en exceso cómo cae en mano el iPhone 6 Plus.
Por último, un detalle: Apple, como en el iPhone 6, ha movido el botón de bloqueo/encendido de la parte superior al lateral derecho, pero la ha dejado en la parte de arriba. En el iPhone 6 es suficiente para tener acceso a ese control cómodamente, pero en el modelo Plus, la mitad de la longitud hubiera sido mejor elección.

Una pantalla para disfrutar

Como pasa cada año con la renovación del teléfono de Apple, la compañía de Cupertino ha sido capaz de colocar su pantalla entre las mejores del año sin duda alguna.
El panel de 5.5 pulgadas con tecnología IPS del nuevo iPhone 6 Plus no solo es grande en tamaño, sino en calidad. Se ve realmente bien, y se aprecia al instante. El contraste nos parece asombroso (1.300:1), los ángulos de visión son ideales y el brillo (más de 500 cd/m2) es suficiente para una visibilidad en exteriores que no te dará ningún problema.
La resolución que Apple ha escogido para su panel de 5.5 pulgadas es 1080p, lo que nos deja unadensidad de 401 ppp, superior a la del iPhone 6 y de sobra para que la nitidez sea más que destacada.
A que todas estas cifras resulten en una pantalla de tanta calidad contribuye la casi nula separación entre panel y cristal. Con esto se consigue que la pantalla transmita una sensación enorme en intensidad y espectacularidad.
Otro detalle interesante de la pantalla, común tanto al iPhone 6 como al 6 Plus, es la unión del cristal con el marco, que se realiza con un ligerísimo biselado del borde del vidrio, lo que facilita el tacto en esa parte concreta de la pantalla y elimina cualquier posible interferencia entre marco y pantalla. Además le da más sensación de cuidado del terminal.

¿Y qué hay del GB de RAM y la batería?

Pese a tener más pantalla, resolución e incluso aspiraciones más ambiciosas que el iPhone 6, el interior del modelo Plus es idéntico al de su hermano mayor. Ahí está el nuevo procesador A8acompañado de 1 GB de memoria RAM, seguramente el dato técnico más controvertido desde hace varias generaciones del teléfono californiano.
Pero si bien hasta ahora no habíamos tenido dudas sobre la capacidad técnica del hardware más puro en los iPhone, con la llegada del iPhone 6 Plus ya no lo tenemos tan claro. Como comentamos en el análisis del iPhone 6, el procesador A8 unido a iOS 8 nos deja un funcionamiento fluido, apenas imperceptiblemente más ágil que en el iPhone 5s con el que hemos podido compararlo.
La batería del iPhone 6 Plus es un buen avance ... si hablamos de Apple, pero habría que exigirle más
Y es que el rendimiento sobre el papel es mejor que con la generación anterior de iPhone, pero la sensación en el día a día es de rendimiento más justo de lo que nos tiene acostumbrados Apple, y nos tememos que ese GB de memoria RAM que Apple se ha empeñado en mantener inamovible en su iPhone, pueda suponer una pequeña barrera para sacar todo el potencial de las 5.5 pulgadas y lo que iOS 8 puede ofrecerle más adelante. Pero si nos ceñimos al "ahora" ninguna pega en rendimiento
Un factor diferencial del iPhone 6 Plus respecto al modelo pequeño es la capacidad de la batería. Aquí son más de 1.000 mAh extra (2.915 mAh en total) que efectivamente hacen de este iPhone 6 Plus el teléfono de Apple de mayor autonomía de siempre. Pero la diferencia respecto al iPhone 6 no es tanta como esperábamos.
Dicho esto, debes saber que hay que esforzarse mucho para no llegar con batería a media mañana del día siguiente, incluso más si hablamos de tiempo con el terminal en espera. Pero en términos generales, del primer phablet de Apple, y con estas dimensiones, esperábamos un avance más destacado en autonomía, algo que se le perdona demasiado a Apple cuando hay rivales que demuestran que sí que se lo toman en serio.
iOS 8 no llega con la madurez que cabría exigirle a un sistema operativo hoy en día en un equipo con las aspiraciones de un phablet
Respecto al sistema operativo, ya te dimos buena cuenta de iOS 8 en nuestro análisis del iPhone 6. En nuestro caso concreto consideramos que una apuesta firme por el mundo phablet hubiera sido correcto acompañarla de medios y recursos asociados al sistema operativo.
Si tengo más espacio en pantalla, quiero que se aproveche, o al menos debo exigírselo a un sistema operativo. Y ojo, que aquí no solo tiene la culpa Apple. También los desarrolladores tendrán que hacer un esfuerzo para dar validez a esas pulgadas extra que ahora mismo no se pueden aprovechar apenas respecto al iPhone 6.
Y hay ejemplos válidos, como Safari, en el cual cuando giramos el terminal las pestañas hacen acto de aparición como si del navegador de iPad o Mac se tratara. Pero en general, iOS 8 transmite más sensación de proyecto que de realidad (notificaciones que no acaban de funcionar como debieran, Health que es testimonial, fallos de aplicaciones ...)

La cámara del iPhone 6 Plus: pocas veces vas a necesitar otra

Si con la pantalla de los iPhone, a priori sabemos que nos vamos a encontrar una muy buena implementación, Apple nos tiene acostumbrados a una sensación similar con la cámara. La del iPhone 5s ha sido referencia durante mucho tiempo, pero ya comprobamos en nuestra última comparativa que hay más smartphones dispuestos a ser los mejores en fotografía.
Ocho megapíxeles y un tamaño de sensor de 1/3 pulgadas no debería impresionar hoy en día, pero Apple tiene algo infalible: consigue que las fotos salgan prácticamente siempre bien
Así que con la cámara del nuevo iPhone 6 Plus tocaba renovación destacada. Y ésta ha llegado de forma muy notable, aunque los números puedan indicarnos lo contrario.
Sobre el papel las cifras parecen las mismas de siempre: cámara con resolución de 8 megapíxeles, apertura f2.2 y tamaño de sensor de 1/3 pulgadas. En los tres casos los rivales han superado estas cifras este año, pero si nos ceñimos a los resultados, Apple ha vuelto a confirmar que su cámara estará sí o sí entre lo más destacado en fotografía móvil otro buen trecho. Su secreto sigue siendo el procesamiento de las imágenes y en algo que es un éxito entre los consumidores: las fotos prácticamente siempre salen muy bien, sean cual sean las circunstancias.
Las mejoras que más se aprecian en las fotos que hace el iPhone 6 Plus tienen que ver en primer lugar con el enfoque. Apple ha llevado un sistema de enfoque parecido al de las cámaras réflex a su teléfono. Lo ha llamado Focus Pixel y básicamente dedica parte de los píxeles del sensor a recopilar información sobre la distancia entre objetos en los diferentes planos, de manera que la velocidad de ajuste de ese enfoque automático da un salto importante en velocidad.
Este enfoque híbrido (por contraste y por detección de fase, que es la novedad) quizás no lo vayas a apreciar en fotos donde esta parte de la toma de fotografía es sencilla de ejecutar. Me estoy refiriendo a escenas con buena luminosidad y planos buen definidos.
La diferencia realmente la marca a la hora de enfocar correctamente y de forma muy rápida en situaciones de baja luminosidad. Si lo pruebas en modo vídeo,el resultado también es espectacular porque va modificando el enfoque al instante, especialmente si volvemos a una zona por donde ya hemos pasado.
Sacar una foto desenfocada con el iPhone 6 Plus es algo que casi nunca se produce. Ni en escenas con poca luz
La velocidad de funcionamiento de la cámara sigue siendo excelente, y no apreciarás retardo desde que pulsas hasta que haces la fotografía.
Si analizamos los resultados obtenidos en nuestras pruebas, podemos adelantarte que pocas veces vas a necesitar realmente otra cámara de fotos, porque la del iPhone 6 Plus ofrece un excelente resultado de nuevo en casi todas las situaciones.
El trabajo del procesador de imágenes es un nuevo golpe de autoridad para con los rivales. El modo automático es con mucha diferencia el que mejor funciona de todo el mercado, y da igual que la escena tenga un rango dinámico altísimo, que queramos tomar fotos en entornos de luz muy agresiva ... tanto exposición como reproducción del color son excelentes en prácticamente la totalidad de los casos.
También saca muy buena nota Apple cuando se trata de escenas nocturnas. Controla muy bien los focos de luz, trabaja de forma acertada el ruido para reducirlo sin perder demasiado detalles aunque no hace milagros y cuando nos acercamos podemos apreciar el lavado de imagen que se produce para que el ruido no esté apenas presente. En el caso del iPhone 6 Plus, el estabilizador óptico nos ayuda un poco a mantener más baja la velocidad de obturación sin que la escena salga movida o a poder disparar sin aumentar la sensibilidad demasiado, aunque la diferencia de ruido de una toma a otra apenas sea relevante de forma global.
En cuanto a los defectos de la parte fotográfica, nos quedamos con las ganas de ver de qué sería capaz Apple si se atreviera con un sensor de más tamaño o nos diera la posibilidad de trabajar con RAW directamente. También ha vuelto a dejar de lado los controles manuales en su aplicación de cámara, que mantiene una sencillez que ya nos parece hasta excesiva, pero al menos ha abierto esta posibilidad a aplicaciones de terceros.
Y quizás, para algunos usuarios que desean hacer zoom o reeencuadrar la escena una vez tomada la fotografía, los 8 megapíxeles pueden empezar a quedarse cortos.
En el modo de grabación de vídeo, Apple también ha hecho los deberes y ayudado por la estabilización digital, la óptica en el caso del iPhone 6 Plus, y el nuevo procesador digital, el vídeo a 1080p vuelve a ofrecer una calidad muy destacada. Pero con este iPhone 6 Plus nos ha llamado más la atención el resultado que podemos obtener con el modo a 720p y 240 fps, que nos deja videos a cámara lenta 8X muy llamativos.
Por ahora, la marca de Cupertino obvia el modo de vídeo 4K que ya es habitual en sus rivales.


Así es la cámara del nuevo iPhone 6





Sí, podemos entrar en el debate de los megapíxeles y otras virguerías técnicas con las que superar el hardware que Apple incluye en sus teléfonos, pero la realidad nos dice que modelo a modelo se han ido superando en prestaciones, y en la práctica, pocos competidores pueden ofrecer la misma calidad que sus soluciones.
Con el nuevo iPhone 6 y el modelo Plus, la cosa no iba a ser diferente, y esperábamos un apartado especialmente cuidado, tanto en componentes, como en software. No los tenemos en las manos, y mucho menos hemos podido hacer una prueba exhaustiva, pero todo lo que nos cuenten nos suena muy bien, como en anteriores ediciones.
Antes de seguir profundizando, comentar que la cámara del iPhone 6 Plus es superior en algún aspecto importante, algo a valorar, y que puede que anime a los más aficionados a la fotografía y el vídeo a dar el salto al formato más grande.
Como podéis apreciar en las imágenes, la cámara condiciona el diseño del teléfono más que anteriores ocasiones, ya que aparecen como una protuberancia sobre la superficie trasera. Nos cuentan que es más resistente que nunca, a pesar de aparecer más expuesta, y si no la tenemos en cuenta, el grosor es menor que en el iPhone 5S: 6,9 y 7,1 milímetros para los iPhone 6 y 6 Plus, respectivamente.
Hablando de modelos anteriores, y sin querer hacer de adivinos, os recordamos que Apple se ha guardado mejoras importantes para la cámara en las ediciones "S" de sus teléfonos. Posiblemente ocurrirá lo mismo el año que viene, pero el salto conseguido con esta generación parece estar a la altura.
No son a tamaño completo, pero ahí os dejo las muestras que presentaron en el día de ayer, sin ningún tipo de retoque o tratamiento:

Los mismos megapíxeles, una cámara diferente

Apple sigue a lo suyo con esto de los megapíxeles, mientras otros no paran de meter más elementos en menos espacio, ellos se mantienen en los 8 megapíxeles, que en esta ocasión están dentro de un sensor totalmente nuevo.
Es decir, la cámara de los nuevos iPhones, mejor conocida como iSight, es nueva. Las principales mejoras llegan lógicamente en la calidad que se registra, pero lo hace a una mayor velocidad, y con un mayor control sobre los parámetros de la escena.
Lo importante para Apple era conservar un tamaño de sensor grande, que le ha permitido tener un tamaño de píxeles de 1,5 micrones, en lugar de acercarse a los 1,1 micrones de la competencia (en el caso extremo tenemos a los Ultrapíxeles del HTC One, con 2 micrones).
Echando un vistazo a los datos del iPhone 5S, podemos sacar que el tamaño del sensor será el mismo, en torno a 1/3,0 pulgadas (4,89x3,67 mm), ya que cuenta con el mismo tamaño de píxeles, en los mismo 8 megapíxeles.
La lente empleada está compuesta por cinco elementos, un dato en la línea de la competencia, con una apertura máxima f/2,2. El procesador de imagen encargado de lidiar con todos los datos también es nuevo, y está alojado en el nuevo procesador Apple A8.
En cuanto al flash, pues nos encontramos con el mismo sistema que introdujeron en el iPhone 5S, conocido como "True Tone Flash,” basado en dos LEDs de tonalidad diferente, que juegan a conseguir la temperatura ideal para la escena.

Focus Pixels, enfocando como las cámaras Pro

La segunda novedad importante en el conjunto de la cámara tiene que ver con el enfoque, mucho más rápido que en modelos anteriores - la mitad que un iPhone 5S -, gracias al sistema de enfoque por "detección de fase" implementado (en lugar de por contraste).
La tecnología está tomada prestada de las cámaras DSLR, y Apple no solo asegura que enfoca más rápido, también lo hace mejor. Los píxeles determinan la dirección de enfoque y cómo de rápido se han de mover las lentes en consecuencia.
Gracias a Focus Pixels también se ven mejorados otras funcionalidades de la cámara, como es elenfoque automático continuo, algo de lo que se beneficia la grabación de vídeo.
Terminamos este punto comentando que uno de sus principales competidores, el Samsung Galaxy S5, también apuesta por el mismo sistema de enfoque similar, que los coreanos plantean como híbrido, al estar apoyado por un segundo sistema basado en contraste.

Face Time HD y ráfagas frontales

Si el mundo de los selfies no para de ganar relevancia, Apple no iba a descuidar su cámara delantera, y tampoco el sistema de videoconferencias de la casa, Facetime, en esta ocasión bautizado como HD.
Los de Cupertino tampoco se vuelven locos con los megapíxeles de la cámara frontal, y se quedan en 1,2, acompañados por una lente con una apertura máxima de f/2,2. El sensor también es nuevo, y es capaz de registrar un 80% mas de luz que el modelo empleado en el iPhone 5S.

Mejor módulo, también más potencia de proceso, y por último mejor software. Apple ha trabajado el reconocimiento de caras para que sea más rápido y eficiente cuando nos encontramos en grupo.
El siguiente punto a tener en cuenta es la capacidad de realizar ráfagas que tiene el nuevo módulo, en lo que denominan "burst selfie mode". Se pueden registrar hasta diez imágenes por segundo. El sistema reconoce sonrisas y ojos cerrados de las caras, y te ayuda a elegir la mejor toma.
Dos funcionalidades llamativas en esto de Facetime HD son la posibilidad de capturar imágenes y vídeo HDR, también existe la posibilidad de controlar la exposición de forma manual, como ocurre con la iSight trasera.

Estabilización de imágen, mejor en el Plus


Un apartado agridulce, ya que hay diferencias entre los dos modelos de iPhone 6, algo que no puede gustar a todo el mundo. El punto diferenciador está en la estabilización óptica que se ha implementado en el modelo iPhone 6 Plus, que se conforma con un sistema digital en el modelo más pequeño.
Nos cuentan y demuestran que la estabilización de imagen es uno de los puntos fuertes de sus nuevas criaturas, en ambos casos se realiza de forma digital, pero la phablet aporta un extra con la óptica. No tenemos dudas de que las mejoras en el vídeo y situaciones de poca luz serán evidentes, como está ocurriendo con los modelos que ya tenemos en el mercado.
Sin meternos en demasiada profundidad, podemos entender que en el modelo Plus, las ópticas se pueden mover para compensar el movimiento inadecuado para que la toma sea estable, y para controlar la situación tira de giroscopio y del chip M8.

Vídeo de calidad antes que subir de resolución

Ya nos hemos acostumbrado a ver muchos teléfonos que se atreven a grabar en formato 4K - UltraHD -, una resolución que para muchos es excesiva, cuando las mejoras en esto de grabar con una cámara tan pequeña, deberían ir enfocadas en mejorar la tasa de datos por segundo, la estabilización, o las situaciones con poca luz.
Tanto el iPhone 6 como el modelo Plus pueden grabe vídeo en formato 1080p, pero pueden hacerlo a60 imágenes por segundo (también 30 fps). Si bajamos de resolución podemos ampliar los frames por segundo - 120 o 240 fps -, para conseguir grabar vídeo de alta velocidad, o lo que es lo mismo, en cámara lenta.
El enfoque continuo en vídeo es otra de las novedades, tirando de Focus Pixels se asegura que los cambios sean rápidos, incluso si los elementos están en movimiento. No nos olvidamos de la mejor estabilización de vídeo - Cinematic video stabilization -, especialmente el modelo Plus
Con iOS 8 podemos esperar muchas novedades en el vídeo, y el software en general, como el estreno de un nuevo codec de vídeo diseñado por Apple. También serán patentes las mejoras en la captación de contenidos HDR, o incluso los panoramas, que ahora componen una imagen de 43 megapíxeles.
No nos gustaría dejar de valorar la posibilidad de cambiar la exposición en el momento de realizar la toma - mediante una barra táctil -, algo muy útil en la práctica, y que ya habíamos visto en teléfonos como el Xiaomi Mi4.
Por último, no nos queríamos dejar atrás el modo time-lapse que han incluido con iOS8, pudiendo tomar escenas en intervalos, hasta 30 horas. En el siguiente vídeo promocional, podéis ver un apartado en el que se presenta la cámara: